Es una metáfora de la educación,
creo que también relacionada con el Win Win Discipline.
Debemos ayudar a nuestros
alumnos, a todos y cada uno de ellos, así como estas dos mujeres lo hacen
rescatando a los hombres. Debemos rescatar a nuestros alumnos, en el momento en
el que se sientan perdidos y sean arrastrados por la multitud educacional. Debemos
pararnos a pensar que necesitan, cuáles son sus problemas, sus necesidades,
etc. Nuestra función es guiarles y apoyarles, pero hacerlo desde el momento en
el que lo necesiten. Es decir, debemos radicar el problema, ya sea
disciplinario, académico, social, etc. Ya que además de dar clase, tenemos muchas
otras funciones; somos orientadores, guías, les proporcionamos apoyo, les
motivamos, programamos, organizamos, evaluamos, controlamos, etc.
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